mayo 20, 2024

Les vale madre veda electoral y entregarán Tarjetas Mujeres Grandeza en Guanajuato.

 La entrega de las 300 mil Tarjetas Mujeres Grandeza se realizará durante la campaña electoral: en marzo, abril, mayo, junio, julio y hasta que sea necesario para terminarlas, admitió Gerardo Trujillo Flores, secretario de Desarrollo Social y Humano en entrevista con AM.

“Estamos a marchas forzadas para poder entregar las 125 mil (que al inicio del año se tenían planeado entregar)”. Y las otras “seguirán su proceso”, comentó. 

-¿O sea esas se van a entregar después?, se le preguntó.

-Sí, sí. Seguirán su proceso.

-¿Pero cuándo?

-Yo acabo con las 125 mil y arranco con las siguientes 175 mil.

-¿Entonces se van a estar entregando durante el proceso electoral, en marzo, abril, mayo, junio..?

Julio, agosto, y el tiempo que sea necesario. Yo espero que las podamos terminar a más tardar en abril porque tenemos un padrón potencial y por eso la determinación de hacer la ampliación a las 175 mil, porque tenemos una demanda adicional”, respondió Trujillo Flores.

En otra entrevista con este diario realizada el 16 de febrero, había declarado que tenían programado entregar las 125 mil a más tardar el 1 de marzo, que es cuando empiezan las campañas electorales. 

Pero ese mismo día, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo anunció que este año se entregarán 300 mil tarjetas rosas, además de que ya no serán solo 8 mil pesos, a razón de mil pesos mensuales, sino 12 mil pesos, con la misma cantidad al mes. 

Esto implica, precisó, un gasto adicional por 2 mil 100 millones de pesos, que sumados a los mil 500 millones de pesos presupuestados originalmente, darán un total de 3 mil 600 millones de pesos. 

Por lo que este lunes se le preguntó a Gerardo Trujillo de dónde se tomarán esos 2,100 millones adicionales. Respondió que los pedirá a la Secretaría de Finanzas como una aplicación presupuestal. “A mí me mandan el dinero, yo no sé”, precisó. 

Ayer, Gerardo Trujillo Flores, Secretario de Desarrollo Social, compareció ante el Congreso del Estado para hacer la Glosa del Sexto Informe de Gobierno. 

Cuestiona Morena carácter electorero 

Durante la comparecencia, diputados de oposición cuestionaron la entrega de tarjetas.

La diputada Irma Leticia González, de Morena, calificó a este programa: “Ella lo ve como un logro en referencia a la diputada panista Katya Soto, pero nosotros lo vemos con fines electorales, de carácter clientelar y corporativo. 

“Estos programas solo los acercan cuando vienen procesos electorales, porque no son universales, porque no solo se les dio a personas vulnerables, porque no están enfocadas a un beneficio social.

“Y también hay algo muy grave -añadió-, que también se les está entregando al PRI, yo he visto que se los reparten en las calles, me han dicho que se los están dando para fortalecer su estructura”, denunció. 

En respuesta, el Secretario de Desarrollo Social expresó: “Alguien podría cuestionar la temporalidad. La temporalidad depende de un problema específico. Hay quien podría pensar que es un programa electorero. 

“Buscamos que tenga un segmento de alta vulnerabilidad, eso hace que vayamos a las zonas de alta vulnerabilidad. Sí se busca que no sea un programa electorero”, afirmó.

Reportó que de las 76 mil tarjetas dadas el año pasado, el 80% se dieron en zonas de alta vulnerabilidad y otras en zonas de pobreza moderada, para que no caigan en situación de pobreza extrema.

En respuesta a la diputada Irma Leticia González, aseguró que la selección de las beneficiarias tienen que ver solo con las reglas de operación. 

Desvió de recursos

La diputada Martha Ortega Roque, del PVEM, reveló que se identificaron 596 mujeres que recibieron las Tarjetas Mujeres Grandeza que tienen parientes trabajando en la Sedeshu.

Precisó que esta información la obtuvo porque de las 76 mil tarjetas rosas que se entregaron el año pasado, el 0.78% son funcionarias públicas, según les respondió la propia Sedeshu a las preguntas que enviaron los diputados del Partido Verde.

Martha Ortega Roque, diputada del PVEM. Foto: Catalina Reyes

Pero el funcionario no respondió sobre la razón de esta situación. 

La diputada de MC, Dessire Ángel Rocha retomó que 600 funcionarias públicas del DIF Municipal de Victoria recibieron tarjetas rosas. 

“¿Secretario, no habría ahí algún desvío de recursos?” le preguntó y a quien corresponde fincar las responsabilidades contra esas 600 personas.

Gerardo Trujillo aseguró que no hubo ningún desvío de recursos. Explicó que cuando se identificó que se habían entregado las tarjetas a funcionarias públicas, se dieron de baja los plásticos, se pidió que se reintegrara el dinero y se iniciaron procedimientos de responsabilidad administrativa ante la Contraloría Municipal. Reconoció que no todas han devuelto el dinero, pero no tenía la cifra de cuántas son. 

Anunció que a partir de este caso, ahora, las beneficiarias de las tarjetas tienen que asegurar que no son funcionarias públicas en el formato de solicitud que firman, quienes aún así reciban el beneficio, tendrán que atenderse a las consecuencias, advirtió. Además esta prohibición también se estableció en las reglas de operación. 

Aclaró que el año pasado que estas 600 servidoras públicas recibieron la tarjeta, no existía la prohibición de ser empleada pública.

Aclaró que hasta el momento no hay ninguna denuncia penal por la aplicación del Programa Mujeres Grandeza.

Mujeres utilizadas: Yulma

La diputada Yulma Rocha, de Movimiento Ciudadano, sobre la tarjeta rosa, expresó:

No me voy a referir a que es un programa electorero, que evidentemente sí lo es y que es utilizado por un partido para construir una candidatura, utilizando a las mujeres, aprovechándose de su pobreza. Es lamentable. A las beneficiarias las utilizaron para rellenar un evento político, (el Informe del Gobernador) a pesar de que estaba lloviendo”, declaró. 

Por eso, preguntó cuál es el efecto redistributivo de la tarjeta rosa, porque si solo se dedica a repartir dinero, sin ningún otro componente, es un programa asistencialista. 

Cuestionó que el IMUG no se haya pronunciado por un programa que ve a las mujeres como un grupo vulnerable y que necesita apoyos para salir adelante. Si es así, perpetúan la visión asistencialista de las mujeres. 

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