noviembre 24, 2024

Quitar profesionalidad al Poder Judicial sería mayor error que pretende la reforma, juez de oralidad penal

Retirar la profesionalidad en el Poder Judicial sería el mayor error que pretende la reforma, señaló José de Jesús Delgado Ojeda, juez de oralidad penal, pues ahora los jueces y magistrados no tendrían independencia para juzgar efectivamente los casos que les llegan.

“Esta reforma significa que todos los trabajadores nos vamos a quedar fuera del Poder Judicial, y ahora no va z haber jueces y magistrados capacitados, sino quienes sean elegidos en un ‘tómbola’, y pueden no tener la capacidad para ser independientes en la revolución de un caso”, indicó el juez de oralidad penal.

Fue en los juzgados de oralidad penal de Irapuato, alrededor de 60 trabajadores del Poder Judicial del Estado de Guanajuato, alzaron la voz en contra de las reformas que se pretenden aplicar al Poder Judicial Federal, lo que a su parecer quitaría la independencia para escalar libremente en este organismo, y sobre todo dar fallos libres y sin sesgo en los procesos judiciales que llevan.

Delgado Ojeda, recordó, que la carrera judicial, comienza sin pago, pues algunos iniciaron como saca copias o ayudantes, pero esto lo hacían debido al gusto por ayudar a las personas.

La carrera judicial, señalaron, es parte importante de la independencia de estos organismos, pues con ellos se toma experiencia, al poder hacer maestrías y doctorados mientras se trabaja.

Con consignas como “Poder Judicial, Justicia Imparcial”, “México escucha, esta es tu lucha” y “Sin color, sin partido, la justicia se ha impartido”, fue como estos trabajadores de los juzgados penales del Poder Judicial del Estado piden que no llegue la reforma al Poder Judicial Federal, pues sería un error tener gente sin capacidad quien dictamine una libertad o absolución en un caso jurídico.

Aunque señalaron que el Poder Judicial necesita una reforma, las que pretende aplicar el Ejecutivo Federal, no es lo que se necesita, pues los jueces y magistrados no deben ser carismáticos para poder ser elegidos, pues la justicia no lo requiere, sino personas capaces que puedan dar un veredicto (guste o no) justo a quienes tienen un problema jurídico.

Con información de periodico «AM»

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